Este es el reclamo de Kanchanaburi, a algo más de 100 Km de Bangkok, el puente sobre el río Kwai. La película del mismo nombre lo hizo famoso, aunque su fama se la ganó bastante antes por una macabra cifra. Más de 100.000 personas murieron construyendo esta vía de ferrocarril conocida como el ferrocarril de la muerte: más de 400Km de vía que unen Tailandia con Birmania construídas en tan sólo 6 meses y que se convirtieron en una de las vías de suministros del ejército Nipón.
Ese fue también el reclamo para nosotros, la ciudad de Kanchanaburi ofrece a los turistas un museo sobre el ferrocarril, otro sobre la segunda guerra mundial, dos cementerios de guerra, varios memoriales y por supuesto, el famoso puente.
Para aquellos que no acaben de creer que el puente es el real (el de la película vaya) decir que el puente de la película fue una reproducción construída en madera del original que sigue en uso desde 1945, después de ser reconstruido tras los bombarderos aliados que dañaron varios de los arcos del puente.
La calle para los extranjeros se llama Mae Nam Kwae, y es donde se encuentran todas las comodidades para los turistas: guesthouses baratas, bares musicales y de copas (también baratas), centros de masajes y supermercados. Además se pueden ver a hombres de 60 años paseando con jovencitas tailandesas, suponemos que algo más que amigas y menos que pareja. Según leímos en varios blogs, se trata de expatriados que deciden pasar su jubilación en la paz y la armonía que se respira en Kanchanaburi. En está ciudad la vida transcurre tranquila y los bares no consiguen arrastrar la fiesta que hay en Koh Pangan, aunque por la música y el precio del alcohol se diría que lo intentan.
Junto a este turismo de expatriados también se pueden ver jóvenes mochileros que se acercan a ver el puente de camino pero que su destino es el Parque Nacional de Erawan, conocido por sus cascadas. Nosotros aprovechamos para hacer una visita al puente sobre el río Kwai bien pronto por la mañana para evitar a los grupos organizados y nos esperamos hasta que pudimos ver pasar el tren.
Al otro lado del río, si uno anda sobre las vías del tren, hay un templo budista chino muy colorido y que ofrece un paseo muy bonito, sobre todo si se va antes de que el calor empiece a apretar. De vuelta, a media mañana, empezamos a ver muchos más turistas. Todo un acierto salir temprano.
Después de echar una siesta al más puro estilo español (no hay que perder las buenas costumbres 😉 ), nos acercamos a uno de los cementerios de guerra. Es sobrecogedor ver las tumbas y las fechas de fallecimiento, pero sobre todo las edades de los soldados: muchos murieron con tan sólo 20 años y los mayores no tenían más de 45. Las causas de muerte eran generalmente desnutrición y cansacio. Al menos nosotros no éramos muy conscientes de la fuerza con la que golpeó la Segunda Guerra Mundial en Asia, en Kanchanaburi están los memoriales y cementerios dispuestos a enseñárnoslo.
Aprovechando que estabamos en el hostal más barato hasta la fecha y el bonito jardín que tenía, nos tomamos un segundo día en Kanchanaburi para poner en orden todas las cosas pendientes y poder hacer la colada y descansar. Un día disfrutando de la paz que se respira en Kanchanaburi.
Interesante relato de la historia, desde el sitio y el lugar que ocurrió. Es la mejor manera, siempre se aprende algo, la película era pintoresca, pero desconocía el enorme número de muertes y la constrcución del ferrocarril.
Erawan, hijo de Erathor… No he podido evitarlo, perdón 🙁 ya cierro la puerta al salir.
Después del momento nerd… sobrecogedor el cementerio y la historia del puente. La ultima foto es preciosa. Pasadlo bieeeen 🙂
Jajaja nosotros tampoco pudimos evitarlo y dijimos lo mismo!! No te pierdas nuestro próximo post sobre las cascadas de Erawan, este viernes (hijo de Erathor)
muchos besos 🙂
El puente impresiona, me gusta mucho la foto de Roser sentada en las vías. El cementerio te da una valiosa información, y además se ha visto en películas americanas. Disfrud mucho. Besos
El cementerio impone bastante y te traslada, efectivamente a las películas norteamericanas de la IIGuerra Mundial
Nadie silbaba por el puente?
Impresionantes imágenes, impresionantes historias.