El complejo arqueológico de Bagan 2

Todo eso que ves… antes eran templos. Y lo siguen siendo. La zona de Bagan es un complejo arqueológico que comprende tres ciudades o pueblos y en el que hay más de 2000 templos. Aunque pueda sonar aburrido el hecho de tener que visitar tantos templos, merece la pena.

Entre las ciudades de Old Bagan, New Bagan y Nyaung-U hay una enorme extensión a medio camino entre el desierto y el bosque tropical salpicado de pagodas en distintos estados ruinosos. Unas se conservan estupendamente mientras que otras han visto mejores días. Eso sí, todas tienen dentro su Buda en perfecto estado. A parte de visitar algunos de los templos más famosos, quizás la mejor opción es subir a alguna de las pagodas para conseguir ver gran parte del conjunto desde las alturas que es como mejor se aprecia.

Shwe Zigon Zedi

Nosotros alquilamos una moto eléctrica para poder recorrer el complejo y poder ir a ver la salida y la puesta de sol a las pagodas. La salida del sol nos gustó un poco más que las dos puestas de sol que vimos, pero eso ya depende de cada uno y de las ganas que se tengan de levantarse a las 5 de la mañana.

Vistas desde lo alto

Compartiendo la puesta y la salida del sol

Ir a ver la puesta y la salida del sol en Bagan no es la idea más original que se puede tener y aunque es bonito, es muy difícil poder llegar a disfrutarla. La primera puesta de sol de las dos que vimos fue hacinados en la cima de una de las pagodas más famosas (la Shwesandaw) entre empujones de grupos organizados que llegaban sin parar. Al final debíamos ser más de 100 personas encaramadas a la pagoda sin poder movernos y con un ruido constante. Imposible disfrutar así de las puesta de sol, toda una lástima.

Divisando el horizonte

Para la segunda puesta de sol nos alejamos de las pagodas más famosas y pudimos disfrutarla en lo alto de un templo donde no seríamos más de 10 personas. Aunque esto va a ser casi imposible ahora porque a partir del 1 de marzo de 2016 el gobierno Birmano prohibirá a los visitantes subir a las pagodas. A esta norma hay 4 excepciones, así que suponemos que si antes ya estaban abarrotadas ahora será mucho peor.

Incluso a la salida del sol, a las 5:30 de la mañana, había por lo menos 40 o 50 personas en lo alto de la pagoda donde estábamos. Por suerte esta vez habíamos llegado temprano y nos habíamos conseguido un buen sitio.

Algo que nos sorprendió ya que imaginábamos que el volúmen de gente en Bagan sería alto, pero no a ese nivel.

Salida del sol

Habilitado para los turistas

Los extranjeros pagamos por entrar a Bagan 25000Kyats por persona. El autobús y el tren, como parece costumbre en este país, te dejan tirados en medio de ningún lugar, a 6 Km de la ciudad más cercana del triángulo que conforma el centro arqueológico. En medio de la única carretera que te lleva a las ciudades o a los templos hay una taquilla donde te piden la entrada. El derecho a acercarte a las ciudades ya vale dinero. La verdad es que es una entrada muy cara, pero la pagas a desgana y sigues adelante. A medida que pasan los días y visitas la zona te preguntas que se hace de todo ese dinero y en qué momento te pedirán que les enseñes la entrada.

En todo el complejo no hay ni una explicación en inglés que te diga de qué año son los templos, qué representan, quién los construyó… No dispones de ningún tipo de información pese a la infinidad de carteles, estos si en inglés, que dicen: “Déjame mostrarte la cultura de Myanmar”. Eso precisamente es lo que queríamos, conocer la cultura de Myanmar, pero no hay nada.

Ta’ enterao’?

En Old Bagan hay un museo, por lo visto el museo está en inglés, pero no llegamos a saberlo nunca porque te cobran la entrada a parte: 5000Kyats más cada uno y son varias salas con estatuas de Buda. Al final acabas un poco molesto por saber donde se invierten esos 25$ por persona que cuesta la entrada mientras visitas los templos con una fotocopia del mapa del hotel porque el mapa del complejo te lo venden a parte de la entrada.

Aún así, Bagan nos gustó mucho ya que te transporta a otras épocas y cuando te encuentras en lo alto de la pagoda con las vistas al resto del complejo puedes imaginar el esplendor artístico que tuvo en su día.

Adiós querida Bagan